domingo, 24 de octubre de 2010

Tus ojos me miran


Miras de reojo cuando sabes que ella no se da cuenta, cuando está mirando para otro lado entretenida con otra cosa. Y la observas moverse, su gesto, su figura. Esa piel pálida que la hace tan bonita. Sus curvas definidas bajo la caída de la tela del vestido. Cuando intuyes que va a volver el gesto, te giras y miras hacia otro lado como si nunca hubieras mirado hacia ella.


Miras descarado, sin vergüenza, directamente a los ojos, seguro de ti mismo. Escrutador hasta la incomodidad. Desafiante la miras de arriba abajo, sin importarte si se da cuenta o no. Creyéndote capaz de conseguirlo todo. Triunfador.


O cierras los ojos y te mantienes al margen y no dices nada, ni miras nada. Te quedas callado y dejas que el tiempo pase por delante tuya, sin intervenir. Y llega un momento, que aquello que antes pensabas sobre cómo sería la cosa si abrieras los ojos, ya ni si quiera lo piensas.

martes, 12 de octubre de 2010

Miradas

Con un gesto de tu mano me dices muchas cosas. Desvela ese estado de ánimo que tratas de ocultar. Gestos que no puedes controlar, que funcionan por si solos.


Con una palabra consigues expresar tantas cosas que a veces se te agolpan todas embarullándose al salir. Con un beso resuelves emociones que no reprimes.


Es con la mirada con la que lo dices todo. Con la mirada, y ese gesto de atención, de sorpresa, de duda, de emoción.





Con la mirada es con lo que más me dices.